23 junio 2010

Metro cúbico

Por: Paola Arenas

TeatroStageFest se inauguró ayer con el montaje m3, una producción española que mezcla técnicas clown con el surrealismo y teatro del absurdo, relatando una historia donde un personaje llega a vivir a su nueva casa, la cual mide 1 m3. Así, en el desarrollo de la obra, el protagonista pasa una odisea para lavar su ropa, poner un mueble, hacer una fiesta o recoger lo que queda de ella.
Por medio de rutinas muy sencillas, Fernando logra tal empatía con el público que chicos y grandes soltaron tremendas carcajadas durante los 50 minutos del espectáculo.
El concepto de la obra es muy sencillo, reduce el espacio escénico de tal manera que lleva más el montaje en sí, sacando del actor y los recursos técnicos una puesta irónicamente redonda dentro de un cubo. El elemento multimedia es manejado sin excesos y en momentos precisos, permitiendo cambios escenográficos y mantener el ritmo siempre arriba.
Este montaje ha viajado por todo Latinoamérica, Europa y Asia con mucho éxito, sorteando la barrera del lenguaje con trabajo corporal y simples onomatopeyas.
El festival comienza con el pie derecho, un buen montaje, un primer lleno y celebrando el habla hispana sin pronunciar palabra.


> Ficha técnica.

> M3 (metro cúbico), una odisea SinEspacio
> Cía. Mr. Kubrik Producciones
> Con: Fernando Sánchez-Cabezudo.
> Dir: Jorge Sánchez-Cabezudo
> Video, iluminación y audio: Pauka Anta Gutiérrez
> Manager de producción Esther D'Andrea
> Dur:50 min.

11 junio 2010

T.W. Adorno. Individuo autónomo-arte disonante

Jorge Juanes
Presentación editorial
Por: Luis Mauricio Martínez

Pensar el arte desde el arte, es una de las frases textuales del crítico de arte Jorge Juanes, premisa utilizada por José Botaya Oest ante los asistentes a la presentación del nuevo libro de Juanes: T.W. Adorno, individuo autónomo –arte disonante. Dicha publicación es coeditada por la Dirección General de Publicaciones del Conaculta y Ediciones Magenta. La cita tuvo lugar en la Galería Jesús Gallardo dentro del teatro Manuel Doblado

Después de la presentación de José, Jorge Juanes tomó la palabra. La publicación es un homenaje al filosofo alemán Theodor W. Adorno, en la cual desmenuza sus teorías. Habló de la gran importancia que tiene Adorno en las corrientes del arte contemporáneo. Enfatizando que fue de los primeros en acuñar el concepto de industrias culturales, de manera textual señaló:

La industria cultural, es la conversión de la cultura en mercancía, o sea la cultura que ya no interesa en sí misma sino como mediación para la creación de capital, para las inversiones; ese problema que vio Adorno, es un ente en el cual se construye todo problema del arte en la actualidad, el arte ya no es puesto para sí y sí al servicio de intereses exteriores.

Y es precisamente en ese punto la apuesta de Juanes en este libro: el hombre y la búsqueda de su individualidad ante la mediatización y la dominación capitalista. El arte debe buscar la manera de hacerlo, de defenderse. De hecho Adorno desde un principio apostó en sus teorías porque las obras de arte deben ser autónomas con respecto a los poderes establecidos para establecer una crítica social.

El libro se divide en dos bloques, el primero donde Juanes hace un análisis de la relación que estableció Adorno con algunos de sus contemporáneos a quienes considera artistas de gran talento y con gran justificación de crear, generadores de un nuevo diálogo artístico. Y el segundo bloque es un diálogo de las teorías de Adorno, desde la voz de Juanes. Su adquisición es necesaria para entender a profundidad a Adorno, a través del pensamiento del crítico mexicano.

Lo relevante y por lo que muchos asistieron es por las ideas que Jorge concibe acerca del arte, para muestra unas palabras textuales:

El peor peligro del arte es no tener peligros.

El arte sólo habla para quien esta dispuesto a ver, a oir, a pensar porque las obras son mudas si no hay aquel interlocutor dispuesto.

Una delicia escuchar a un autor explicar su libro y cómo lo concibió, la pasión con la que expuso sus ideas habla de su amor por el conocimiento, por Adorno y por su teorías sobre el arte contemporáneo.