AZARES PARALELOS

EXPOSICIÓN PLÁSTICA COLECTIVA

...Visiones y re-visiones tejidas sin un hilo conductor...

Por: Luis Mauricio Martínez

Con su manto de oscuridad cubría la noche el vestíbulo de la Unidad Académica para la Cultura y las Artes. Un silencio total. De pronto fue interrumpido por un remolino de personas congregadas ante lo que parecía una fiesta: música electrónica, iluminación multicolor, gente yendo y viniendo y al fondo unas obras de arte sobre mamparas y una montaña de papeles en el suelo, pues no, no era una fiesta, era una exposición plástica organizada por cuatro alumnas de la licenciatura en Cultura y Arte que se imparte en el recinto mencionado el día 28 del presente mes. La idea es una fiesta, que la gente no piense que viene a la inauguración de una exposición, sino que viene a divertirse, el objetivo es un enfoque informal para que la gente se acerque a este tipo de eventos, explicó una de las organizadoras. Y lograron el cometido. Había que asomarse hasta el vestíbulo donde se presentaban las obras para confirmar que se trataba de una exposición de arte.

Azares Paralelos, son texturas, colores, formas sin un hilo conductor más que presentar obras de una serie determinada de cada uno de los artistas. Cuatro fueron los invitados:
Moli-Moli, de su serie El Nidito, presentó ilustraciones en gran formato sobre papel, utilizando lápices de colores, pasteles, y más técnicas. Obras coloridas con temas cotidianos: un par de patines, un casco, un sillón, nada nuevo.

Ángel de los Santos Flores, participo con una pequeña muestra de su serie Desde Petrolea. Oleos en mediano formato, predominio en tonos ocres, un tanto oscuros; figuras humanas deformadas, abstractas. Elaborados con una técnica básica, sin tanto rebuscamiento, da la impresión de que algo les falta para lograr despuntar.

Eduardo Castillo, de su serie Ladrón de Bicicletas, mostró una serie de fotografías con efectos de distorsión y poca profundidad de campo. Buenas tomas sin mayor complicación que mostrar un instante de la realidad.
Lo que llamó más la atención fue la propuesta de Roberto Ortiz, una montaña de hojas arrugadas, eran fotocopias de ilustraciones hechas quizá al carbón o a lápiz. La gente pudo llevárselas, jugar con ellas…lo que quisiera, eso dio el toque divertido de la velada.

Y para coronar la muestra, directo desde el Distrito Federal, los bits electrónicos de NO TERROR, un dueto conformado por Oro de Neta, él elabora la música con una computadora personal y una caja de ritmos, acompañados de la melodiosa voz de Lo blondo, la vocalista, una propuesta relajada y contemporánea. En otra nota podrán leer la entrevista exclusiva que concedieron a este medio.

Un evento bien hecho, lo cual demuestra el profesionalismo de las cuatro organizadoras: Dejanira Gonzáles, Mariana Calvo, Donaji Valadez y Fabiola Martínez.
La muestra estará abierta al público hasta el próximo 12 de diciembre en horarios hábiles. Si bien los expositores no son unos virtuosos del arte, son la viva muestra del talento joven, y sobre todo la disciplina para irse abriendo paso en el camino artístico.